miércoles, 4 de abril de 2012

RISOTTO AL AZAFRÁN


Antes de empezar mis vacaciones no puedo evitar añadir esta receta, que tiene de nuevo como base principal el arroz. Su realización es facilísima y el resultado, si te gusta el arroz, no te dejará indiferente.
La verdad es que nunca pensé que un arroz al estilo italiano gustaría tanto en mi casa, acostumbrados como estamos a otro tipo de arroz, digamos más al estilo español. Y si embargo,  desde la primera vez que hice esta receta, que Ferran Adriá presenta en su libro “La Comida de la Familia”, supe que se convertiría en uno de los platos básicos de mi casa.
Este plato aúna simplicidad y sabor y me confirma una vez más el porqué el arroz es uno de los básicos de la cocina mediterránea.






Ingredientes (para 4 personas)
·         unas hebras de azafrán
·         50  g de cebolla
·         3 cucharadas de aceite de oliva
·         50 ml de vino
·         300 g de arroz
·         1 litro de caldo de pollo
·         50 g de parmesano
·         30 g de mantequilla
·         1 cucharada de zumo de limón
·         sal

Preparación
Envuelve las hebras de azafrán en papel de aluminio y tuéstalo en una sartén o plancha procurando que no se queme.

Pon a calentar a fuego medio el aceite y rehoga la cebolla finamente picada hasta que quede transparente.

Echa el vino blanco y deja reducir unos minutos.

Añade el arroz y rehoga durante 2 ó 3 minutos removiendo con una cuchara de palo para que no se pegue.

Incorpora el caldo de pollo caliente poco a poco y remueve para que no se pegue. A continuación echa el azafrán y deja que cueza a fuego medio durante 15 minutos.

Finalmente, añade la mantequilla cortada en daditos y el parmesano y remueve para que se mezcle bien con el arroz. Rectifica de sal si es necesario y echa el zumo de limón.

Sirve el risotto solo o acompañado con finas láminas de champiñón por encima.

Espero que os guste, a nosotros nos vuelve locos.


Chemadiez

Recomendación: Si quieres bordar el plato utiliza caldo de pollo casero, te llevará un poco más de tiempo pero merece la pena. Aunque te aseguro que con un buen caldo, de los que venden preparados, también obtendrás un resultado excelente. Imprimir artículo

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