Si nos has hecho nunca albóndigas esta receta te ayudará a
conseguir un plato que asombrará a todos los que las prueben. Sólo tienes que
seguir los pasos y no pasarte con las especias y la sal, que podrían arruinarte
el resultado.
Como tengo muy claro que después del primer intento no vas a
parar de hacer albóndigas, es seguro que irás introduciendo pequeñas
modificaciones que terminarán acercándote a la perfección albondiguil.
Mi suegra, que es la que me pasó esta receta, lleva ya tal
número de albóndigas en su haber que consigue una textura parecida al
“foie-gras”. ¡Y es que parece que se te deshacen en la boca!.
Menudas risas que nos hemos pasado mis cuñadas y yo cada vez
que mi suegra hacía albóndigas para la comida familiar y se repetía el siguiente
diálogo:
- Ya sabemos el secreto de tus albóndigas: echas foie-gras
- ¡que no, que no, que mis albóndigas no llevan foie-gras!
Ingredientes:
Para las albóndigas:
- 1,2 kg de carne picada (1 kg de ternera y 200 g de cerdo)
- 2 huevos
- 1 vaso de leche
- 4 rebanadas de pan de molde sin corteza
- 3 dientes de ajo
- 1 cucharadita de canela en polvo
- Perejil
- Nuez moscada
- Sal y pimienta molida
- Harina
- Aceite de oliva
- 750 ml de agua
- 1 cucharada de pimienta negra en grano
- 1 cucharada de piñones o almendras
- 1 vaso de vino blanco
- ½ vaso de tomate frito casero
- Tomillo en rama
- Canela en rama
- 2 cucharaditas de extracto de carne (tipo Bovril)
Preparación:
En un tazón se pone el pan de molde en remojo con la leche.
Salpimentar la carne picada al gusto y a continuación
mezclar con los huevos el ajo y el perejil finamente picado, el pan de molde
con la leche, la cucharadita de canela y una pizca de nuez moscada.
Una vez bien mezclado, se deja reposar al menos una hora
antes de empezar a formar las bolas de carne.
A continuación se pone a calentar abundante aceite en una
sartén y se van formando bolas de carne (a mí me gustan más bien gorditas). Se
pasan por harina y se van friendo hasta que estén bien doraditas por las dos
partes.
Con una espumadera se van sacando las albóndigas de la
sartén y se van poniendo en una cacerola aparte.
Si es necesario, se cuela el aceite para retirar los restos
de harina que van quedando en el fondo y que con el tiempo se va quemando. Así evitaremos que las últimas albóndigas
queden con restos de harina requemada.
Cuando tengamos todas las albóndigas fritas en la cacerola, añadir el agua, el vino, el tomate frito, 2 ó 3 ramitas de tomillo, los
piñones, la pimienta en grano, el laurel, la canela en rama y el extracto de carne.
Cocer a fuego lento durante 1 hora aproximadamente.
Dejar
reposar durante 10 minutos y servir solas o con patatas fritas.
Espero que os gusten. En mi casa las devoran.
Chemadiez
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